FPV 2012: MAS DE LO MISMO?

SIN VUELTAS
POR: JOSE TRONCON ASTE
FPV 2012: MAS DE LO MISMO?
EL MAL ENDEMICO

El pasado 07 de enero encontramos en el Suplemento Deportivo “DEPORTE TOTAL” del Diario EL COMERCIO una columna denominada YO DIGO la que en ésta oportunidad firma nuestro colega Fernando Lozano bajo el titulo de CUESTION DE RAZA, en el que hace una especie de resonancia magnética de la dirigencia deportiva en nuestro país. Nos pareció sumamente importante trasplantar los conceptos vertidos en ésta nota obviamente direccionada al fútbol pero que perfectamente se puede adaptar o ensamblar en todo el sistema deportivo de nuestro país, al voleibol, más aún cuando en ocho meses aproximadamente y una vez finalizados los Juegos Olímpicos de Londres 2012 deberán realizarse los procesos electorales en todas las Federaciones Deportivas excepto en la de Fútbol la que por mandato de los Estatutos de la FIFA se realizan luego de los Campeonatos Mundiales.

Dice Lozano que el dirigente peruano promedio es casi un “otorongo” congresal pues esta hecho de esa estirpe y por lo tanto de esa raza. Obviamente no existen “robacables”, “comepollos” o “robaluces” eso si algunos “comechados” que presumen su estatus a partir de ser cabeza de un Club o de una Asociación. Del trasplante al voleibol podríamos añadir a gente oportunista que llega a la FPV por lo menos asi fue en los últimos veinte años para hacer la suya es decir buscar una posición dirigencial en el ámbito internacional y asegurarse una sólida posición económica personal.

El distorsionado perfil se completa porque en primer lugar de voleibol que es lo que nos ocupa saben poco o nada pero de “figuretismo” saben mucho y de las comodidades que ofrece la dirigencia con dineros que no son suyos mucho más. Finalmente les interesa más el estatus del nivel federativo que se ofrece a nivel nacional o internacional que el bien general, el desarrollo y evolución del deporte que conducen.

Ese formato de dirigente como el del voleibol peruano los últimos veinte años busca compensar con el deporte su discreta actuación en otros rubros donde no son los líderes sino uno más. Obviamente esa obsesión por el poder los lleva a la desesperación de buscar reelecciones a cualquier precio sin interesarle la interminable cantidad de fracasos de su gestión precedente y sin ningún proyecto visionario de futuro. La improvisación y el cortoplacismo son sus disparatados argumentos.

La otra causa de de fondo es la desnaturalización de los procesos electorales en las Federaciones Deportivas Nacionales y ésta dada por la normatividad legal vigente en la materia. No es que estemos en desacuerdo con la elección democrática de los Consejos Directivos por sus propias Asambleas de Bases sino por la necesidad de establecer los mecanismos de control para que éstos procesos sean claros y transparentes lejos de los intentos manipulantes de la dirigencia en funciones que pretende direccionar el proceso desde el poder.. Sugerimos que además de los TRES MIEMBROS elegidos por las Bases el Comité Electoral esté integrado por un representante del Instituto Peruano del Deporte y uno del Comité Olímpico Peruano.

La pregunta es entonces reiterativa: ¿el año 2012 en la FPV será MAS DE LO MISMO? Tenemos la corazonada que así será sin embargo hay varias interrogantes en el aire: ¿Convocará Juan Castro a último momento a una Asamblea Nacional de Bases para proponer la modificación del Estatuto de la FPV en su artículo 23 para tener la vía libre para una segunda reelección en el Consejo Directivo? ¿Aprobaran las Bases una modificación con nombre propio? ¿Aceptará Registros Públicos la modificación antes planteada? En un país donde la seguridad jurídica prácticamente no existe nos resulta utópico que suceda lo contrario. Finalmente el eslabón perdido: ¿tendrán los clubes de la Liga Nacional el democrático derecho al voto directo, universal y secreto?

El MAL ENDEMICO al que nos referimos en nuestro titular está entonces en los dirigentes de las Bases del voleibol peruano, los dirigentes de clubes y ligas porque son ellos los que deciden y solo si lo hacen en forma cohesionada podrán hacer valer sus derechos. Nos preguntamos: ¿podría existir la FPV si en la base de su pirámide estructural no existieran las ligas y los clubes? Esto es imposible. Esta última interrogante es la que nos tienen que responder precisamente las ligas y los clubes.

Que no se tome éstas reflexiones como una actitud de confrontación con la actual dirigencia de la FPV, ellos saben perfectamente que su propio origen fue muy discutible y deben asumir su propia responsabilidad y hacer su propio examen de conciencia con capacidad de autocrítica demostrando dos aspectos fundamentales: Decisión de cambio radical y una gestión corporativa transparente y moderna con reservas morales, vocación de consenso y capacidad de autocrítica, éste es el blanco sobre el que deben disparar las Bases. Ellos tienen la palabra.

HASTA LA PROXIMA
JOISE TRONCON ASTE
PERIODISTA
CARNET CPDP No.379-LIMA
CARNETAIPSNo.000583-PERU.