sábado, 23 de junio de 2012



SIN VUELTAS
POR: JOSE TRONCON ASTE
VOLEIBOL PERUANO:
CUIDANDO LA CANTERA

El presente es uno más de los varios artículos publicados en nuestro Blog en los que nos hemos dedicado a brindar una serie de aportes tendientes a actualizar y mejorar el trabajo de las categorías bases de nuestro deporte a partir de la masificación y la proyección de las diferentes etapas de su consolidación a partir de una correcta distribución de los volúmenes de las cargas de trabajo y la incidencia de una correcta enseñanza de los fundamentos del mismo

Pero antes de profundizar en el análisis de este apasionante tema creemos indispensable citar tres conceptos fundamentales a partir de los cuales debe encararse el trabajo formativo desde las categorías promocionales:
1.-Plan de Desarrollo del deporte a nivel nacional.
2.-Inversión productiva en proyectos
3.-Capacitación y actualización de docencia especializada

1.-PLAN DE DESARROLLO DEL DEPORTE A NIVEL NACIONAL.-
No se trata de desvestir santos para vestir otros; se trata de sembrar la semilla en los diferentes lugares considerados como potenciales p olos de desarrollo del deporte. Es muy fácil traer a Lima una camionada de proyectos de talentos que mucha veces no reúnen el perfiles de captación moderna y encerrarlos en una casa para ponerlos en manos de gente sin ningún conocimiento que permita asegurar que en el tiempo esos proyectos de talentos de puedan consolidar proyectándolos a la la competencia de alto nivel.

El Instituto Peruano del Deporte por mandato de las diferentes leyes que han regido su conducción tiene como obligación prioritaria el diseño de un Plan de Desarrollo del Deporte en macro y para todo el país y a partir de este Plan de Desarrollo piloto las Federaciones Deportivas Nacionales deben estructurar los de sus respectivos sectores pero en honor a la verdad nunca se hizo en ninguno de los niveles citados.

Tampoco se trata del denominado Plan Maestro que en algún momento con la mejor intención se desarrolló en la FPV por los años 1985-1990 el mismo que se basó en una supuesta proyección de posibles resultados a alcanzar en el tiempo a nivel de selecciones nacionales sino de un ambicioso plan de siembra de apoyo logístico y de recursos humanos bajo la dirección de especialistas debidamente capacitados y diseñado por una verdadera Unidad Técnica con conocimiento de causa, respaldo de trayectoria y reservas morales y dentro de bases ideológicas establecidas por una Dirección Técnica Nacional que es la entidad que fija los objetivos de las políticas de desarrollo del deporte distanciándolo de los intereses de la política dirigencial.

2.-INVERSION PRODUCTIVA EN PROYECTOS.-
Cuando hemos escrito sobre planes de trabajo lo hemos hecho en términos de UN PROYECTO sustentado en un presupuesto participativo por resultados a nivel nacional, es decir producir en beneficio de mayores sectores de desarrollo y de una mayor cantidad de talentos participantes. Aclaramos una vez más: no se piense que LOS TALENTOS SE HACEN ese es un error de percepción que está asfixiando al deporte peruano en general y al voleibol en especial, EL TALENTO NACE pero hay que desarrollarlo y perfeccionarlo en el tiempo y es precisamente éste tipo de proyectos productivos los que nos permiten una adecuada masificación y una mejor captación en función de una planificación y de una metodología adecuada.

3.-CAPACITACIÓN Y ACTUALIZACION DE UNA DOCENCIA ESPECIALIZADA.
Este es un tema crucial y por lo tanto controvertido en éste tipo de proyectos especialmente en nuestro país. Hay un concepto que es fundamental y prioritario para la designación de los Cuerpos Técnicos por parte de la Unidad Técnica que conduce el proceso y es el de la uniformidad de criterios para establecer que es lo que queremos y hacia a donde vamos y la existencia obligatoria de lo que se denomina una VERTICAL DE CONDUCCIÓN es decir un proyecto en común por el que los Técnicos de menores trabajan para nutrir el nivel de élite en base a un solo pensamiento técnico y diseño táctico que como consecuencia debe ser liderado y supervisado constantemente por el Cuerpo Técnico de mayores. En resumen el proceso en general debe hablar un mismo idioma y proyectarse hacia los mismos objetivos.

Para ser Técnico en los diferentes niveles de las categorías promocionales no se debe necesariamente conceder una prioridad excluyente al hecho de haber tenido previamente un excelente cartel de jugador, lo fundamental es que estemos ante un verdadero PEDAGOGO es decir una persona con los conocimientos científicos para ENSEÑAR. Tampoco se debe entregar los grupos promocionales a Técnicos jóvenes sin la experiencia necesaria para el manejo de éste tipo de grupos humanos.

En suma el trabajo de cantera no debe estar en manos DE LOS QUE SOBRAN sino de LOS MEJORES. Y es en éste tipo de profesionales en los que hay que invertir para capacitarlos y actualizarlos en los países más desarrollados en el voleibol en esta especialidad para que hagan un verdadero “stage” de no menos de 90 días trabajando al lado de los mejores para luego desarrollar lo aprendido en los polos de desarrollo de nuestro país.

Un pregunta elemental: ¿alguien nos puede decir que hay en común entre Humberto Terrones, Natalia Málaga,Edwin Jiménez y el mismísimo Man Bok Park? Entonces salta la otra pregunta inmediatamente:¿ con que criterio se hacen estos nombramientos que no guardan relación con proyectos comunes a futuro para nuestro voleibol? Y finalmente nos preguntamos: ¿’es que en algún momento existió en la FPV una verdadera Comisión de Menores?

Entre los años 1976 y 1982 ciclo en el que nuestro país ganó los dos primeros Campeonatos Sudamericanos de Menores se trabajo en base a un Plan de Trabajo a mediano y largo plazo elaborado por las Profesoras Norma Velarde y Luisa Fuentes, por el aquél entonces Jefe de Equipo que suscribe la presente nota y el profesor Javier Beltrán pero luego de finalizado el Sudamericano de 1982 el Plan no se corrigió sino se quebró y para los siguientes Torneos se designó a una Técnica China que no terminó su trabajo y a un Técnico Japonés que venía a realizar su Tesis de Grado enviado por una Agencia de Cooperación de dicho país, y para el torneo de 1986 en Piura volvió la Profesora Norma Velarde siempre acompañada de Luisa Fuentes pero se sufrió las consecuencias de haber vuelto a empezar y con las limitaciones existentes.

Pero hay un ingrediente adicional y es que los clubes que produjeron durante años deportistas de alto rendimiento dejaron de hacerlo porque la falta de un reglamento que respete los derechos de unos y las obligaciones de los otros que no era el adecuado lo impidió y hoy ni siquiera existe; la FPV debe darle a los clubes el espacio al que tienen derecho y no simplemente faltarles el respeto con una suerte de “estatización” de jugadoras obviando por completo a quienes con gran esfuerzo forman y mantienen su patrimonio excluyente y exclusivo que son sus deportistas.

Encaremos el trabajo de canteras con la dedicación y la profesionalidad que ellas merecen y terminemos con este mamarracho de “escuelitas” de “educación inicial” que no es de competencia de la FPV y por lo tanto no tienen porque utilizar el patrimonio de los clubes y arrasar además con deportistas de provincias que al final van a parar a los clubes de los dirigentes de turno en la máxima entidad de los mates. Dejen a los clubes desarrollar sus planes de trabajo y estructuren el proyecto sugerido el mismo que redundará en beneficio de todos los que estamos dentro del voleibol. NO OLVIDEMOS QUE EL PASADO TAMBIEN CONDENA A NUESTRAS CANTERAS.

HASTA LA PROXIMA
JOSE TRONCON ASTE
PERIODISTA
CARNET CPDP No.051-LIMA
CARNET AIPS No. 000583-PERU

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